Lista de Enfermedades para Incapacidad Permanente – Actualizado 2025

Lista de Enfermedades para Incapacidad Permanente - Actualizado 2025

¿Te has preguntado alguna vez si tu estado de salud podría darte derecho a una pensión por incapacidad permanente? La realidad es que muchas personas desconocen sus derechos cuando sufren limitaciones graves que afectan su capacidad laboral.

Si estás leyendo esto, es probable que te encuentres en una situación donde necesitas respuestas claras sobre qué enfermedades pueden dar derecho a una prestación económica que compense la pérdida de ingresos por no poder trabajar.

Te entiendo perfectamente. La incertidumbre de no saber si tu patología está reconocida, los trámites burocráticos y la sensación de estar perdido en un sistema complejo pueden generar mucha ansiedad. Por eso, he preparado esta guía completa y actualizada para 2025 que te ayudará a conocer tus opciones.

Aquí encontrarás todo lo que necesitas saber: desde el listado más actualizado de patologías reconocidas hasta los pasos exactos para solicitar tu prestación. Te prometo que al final de este artículo tendrás la información necesaria para tomar decisiones informadas sobre tu futuro laboral y económico.

Podemos ayudarte.

En Ródenas Abogados somos abogados especialistas en incapacidades permanentes. Si necesitas un despacho con amplia experiencia en prestaciones económicas, contacta con nosotros e infórmate sin compromiso. 

¿Qué es la Incapacidad Permanente en 2025?

La incapacidad permanente es una situación médica que reconoce la Seguridad Social cuando un trabajador ve reducida o anulada su capacidad laboral de forma definitiva debido a limitaciones anatómicas o funcionales graves. Esta prestación no depende únicamente del diagnóstico de una enfermedad específica, sino de cómo las secuelas afectan la capacidad funcional para trabajar.

Lo más importante que debes saber es esto: no existe una lista oficial cerrada de enfermedades que garanticen automáticamente la concesión de una incapacidad permanente. El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) evalúa cada caso de manera individual, considerando cómo las secuelas de la patología limitan la capacidad laboral del trabajador.

Grados de Incapacidad Permanente Reconocidos

Existen cuatro tipos principales de incapacidad permanente, cada uno con diferentes niveles de protección económica:

Incapacidad Permanente Parcial: Reduce el rendimiento normal para tu profesión habitual, pero no te impide realizarla. Se compensa con una indemnización de 24 mensualidades.

Incapacidad Permanente Total: Te inhabilita para tu profesión habitual, pero puedes dedicarte a otra actividad laboral diferente. Corresponde al 55% de la base reguladora, que puede aumentar al 75% para mayores de 55 años que no trabajen.

Incapacidad Permanente Absoluta: Te inhabilita para cualquier profesión u oficio. Corresponde al 100% de la base reguladora.

Gran Invalidez: Además de estar inhabilitado para trabajar, necesitas ayuda de terceros para actividades básicas de la vida diaria. Incluye un complemento adicional para remunerar al cuidador.

Listado Completo de Enfermedades para Incapacidad Permanente 2025

A continuación, te presento el listado más completo y actualizado de enfermedades que pueden dar derecho a una incapacidad permanente, organizadas alfabéticamente para facilitar tu consulta:

A

  • Agorafobia
  • Alcoholismo (cuando genera limitaciones funcionales graves)
  • Alzheimer (especialmente en fases avanzadas)
  • Aneurisma
  • Angina de pecho
  • Ansiedad (trastornos graves y crónicos)
  • Apnea del Sueño (casos severos)
  • Artritis psoriásica
  • Artritis reumatoide (especialmente en casos severos)
  • Artrosis (cuando limita significativamente la movilidad)
  • Asma (casos graves e incontrolados)
  • Ataxia

B-C

  • Cardiopatías (diversas patologías del corazón)
  • Cefaleas crónicas (migrañas incapacitantes)
  • Cirrosis hepática (especialmente en estadios avanzados)
  • Colitis ulcerosa
  • Condromalacia rotuliana
  • Cáncer (diversos tipos según estadio y evolución):
    • Cáncer de colon
    • Cáncer de esófago
    • Cáncer de laringe
    • Cáncer de mama
    • Cáncer de piel
    • Cáncer de próstata
    • Cáncer de pulmón
    • Cáncer de recto
    • Cáncer de riñón
    • Cáncer de vejiga
  • Enfermedad de Crohn

D-E

  • Demencia (todas las formas)
  • Depresión mayor (especialmente casos resistentes al tratamiento)
  • Diabetes mellitus (con complicaciones graves)
  • Discopatía lumbar
  • ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica)
  • Endometriosis (casos severos)
  • Enfermedad de Behçet
  • Enfermedad de Huntington
  • Enfermedad de Wilson
  • Enfermedad pulmonar intersticial
  • Enfermedades autoinmunes (lupus, síndrome de Sjögren)
  • EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica)
  • Epilepsia (especialmente con crisis frecuentes)
  • Esclerosis múltiple
  • Esquizofrenia
  • Espondilitis anquilosante

F-H

  • Fatiga crónica (síndrome)
  • Fibromialgia (casos avanzados)
  • Fibrosis pulmonar
  • Hepatitis crónica
  • Hernia discal (con limitaciones funcionales importantes)
  • Hipertensión pulmonar
  • Hipotiroidismo (casos graves)

I-L

  • Infarto agudo de miocardio (con secuelas)
  • Insuficiencia cardíaca (crónica)
  • Insuficiencia renal crónica
  • Insuficiencia respiratoria
  • Leucemia
  • Lupus eritematoso sistémico

M-O

  • Mielitis transversa
  • Migraña crónica (incapacitante)
  • Miocardiopatía
  • Miopatías inflamatorias
  • Neumoconiosis
  • Neuropatía periférica
  • Osteoporosis (con fracturas recurrentes)

P-S

  • Párkinson (enfermedad de)
  • Pericarditis crónica
  • Psicosis
  • Síndrome de Fatiga Crónica
  • Síndrome de Guillain-Barré
  • Síndrome de Marfan
  • Síndrome de Sjögren
  • Síndrome del túnel carpiano (bilateral y severo)
  • Síndrome mielodisplásico
  • Síndrome postpolio

T-V

  • Tabaquismo crónico (con complicaciones graves)
  • Trastorno bipolar (especialmente casos graves)
  • Trastorno obsesivo-compulsivo (severo)
  • Trastorno por estrés postraumático
  • Trombocitopenia idiopática
  • Uveítis crónica
  • VIH/SIDA (en estadios avanzados)

Requisitos Legales para Obtener la Incapacidad Permanente en 2025

Para acceder a una pensión por incapacidad permanente, debes cumplir una serie de requisitos específicos que han sido actualizados para 2025:

Requisitos Generales

Los requisitos básicos incluyen estar afiliado a la Seguridad Social en situación de alta o asimilada al alta, no haber alcanzado la edad de jubilación y haber cotizado un tiempo mínimo determinado.

Edad: Debes tener entre 18 y 65 años (edad de jubilación).

Residencia: Residir en España durante al menos 5 años, siendo 2 de ellos consecutivos.

Situación de alta: Estar trabajando y cotizando, o en situación asimilada al alta (baja médica, prestación por desempleo, excedencia forzosa).

Períodos de Cotización Exigidos

Los años de cotización necesarios varían según el tipo de incapacidad y tu edad:

Para enfermedad común:

  • Si tienes menos de 31 años: un tercio del tiempo transcurrido entre los 16 años y la fecha de la incapacidad
  • Si tienes 31 años o más: un cuarto del tiempo transcurrido entre los 20 años y la fecha de la incapacidad, con un mínimo de 5 años

Para accidente laboral o enfermedad profesional: No se exige período de cotización específico.

Cuantías de las Pensiones en 2025

Las pensiones han sido revalorizadas un 2,8% para 2025. Las cuantías mínimas garantizadas son:

Incapacidad Permanente Absoluta:

  • Con cónyuge a cargo: 1.062 euros mensuales
  • Sin cónyuge: 848 euros mensuales
  • Con cónyuge no a cargo: 805 euros mensuales

Cómo Solicitar tu Incapacidad Permanente: Guía Paso a Paso

El proceso para solicitar una incapacidad permanente puede iniciarse de tres formas diferentes:

1. Solicitud del Trabajador

Puedes iniciar el procedimiento dirigiéndote a cualquier oficina del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) y presentando la documentación requerida:

  • DNI, NIE o pasaporte
  • Historial médico completo que acredite tu estado de salud
  • Informes médicos actualizados de especialistas
  • Pruebas diagnósticas (radiografías, resonancias, analíticas)
  • Parte de trabajo (si la enfermedad es de origen laboral)
  • Vida laboral actualizada

2. Inicio de Oficio por el INSS

El INSS puede iniciar el procedimiento de oficio tras evaluar el estado de incapacidad del trabajador durante un proceso de baja médica prolongada.

3. Propuesta de la Mutua

Si la incapacidad deriva de un accidente laboral o enfermedad profesional, la mutua correspondiente puede proponer el inicio del expediente.

Proceso de Evaluación Médica

Un Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI), también conocido como tribunal médico, realizará un examen exhaustivo de tu condición. Este proceso incluye:

  • Revisión de toda la documentación médica
  • Exploración física detallada
  • Evaluación de las limitaciones funcionales
  • Análisis del impacto en tu capacidad laboral

Conclusión: Recibir la Resolución no es el Final del Camino

Obtener el reconocimiento de una incapacidad permanente puede ser un proceso largo y complejo, pero no te rindas. La legislación española protege a los trabajadores que, por circunstancias de salud, no pueden continuar con su actividad laboral habitual.

Lo más importante es que te informes bien, reúnas toda la documentación médica necesaria y actúes dentro de los plazos establecidos. Recuerda que cada caso es único y que una misma enfermedad puede tener diferentes grados de afectación según la persona.

Si te encuentras en una situación donde tu salud limita tu capacidad para trabajar, no dudes en iniciar el proceso. Es tu derecho y una herramienta fundamental para garantizar tu bienestar económico y social.

La incapacidad permanente no es solo una prestación económica; es el reconocimiento de que mereces una vida digna independientemente de las limitaciones que puedas tener. Tu salud y tu futuro son lo más importante, y el sistema está diseñado para protegerte cuando más lo necesitas.

Llámenos sin compromiso
Scroll al inicio