¿Cuál es la diferencia entre declaración responsable y comunicación previa?

Diferencia entre la declaración responsable y la comunicación previa

La declaración responsable y la comunicación previa son dos mecanismos que permiten agilizar el inicio de actividades y proyectos sin necesidad de tramitar una licencia convencional. Aunque ambos procedimientos facilitan la puesta en marcha de actividades mediante la presentación de documentos ante la Administración, existen diferencias clave entre ellos. La declaración responsable implica que el titular manifiesta el cumplimiento de los requisitos normativos y se compromete a mantenerlos, permitiendo a la Administración realizar controles posteriores. En cambio, la comunicación previa consiste en notificar el inicio de una actividad o proyecto sin necesidad de este compromiso expreso, aunque igualmente debe cumplir con la normativa vigente. Ambos procedimientos son fundamentales para simplificar los trámites administrativos y fomentar la actividad económica.

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Normativa sobre la declaración responsable y la comunicación previa

La declaración responsable y la comunicación previa se introdujeron en nuestro ordenamiento jurídico mediante la Ley 17/2009, de 23 de noviembre, que regula el libre acceso a las actividades de servicios y su ejercicio, y la Ley 25/2009, de 22 de diciembre, que adapta diversas normativas a la anterior. Estas leyes transponen al derecho español la Directiva 2006/123/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 12 de diciembre de 2006, conocida como la Directiva de Servicios, cuyo objetivo es fomentar el crecimiento económico y eliminar barreras al comercio en el mercado interior.

Gracias a esta normativa, se permite a los interesados iniciar una actividad, actuación o uso mediante un acto de comunicación a la Administración, en el que se aporta la documentación necesaria. De este modo, se facilita el inicio de actividades, dejando el control administrativo para una fase posterior y promoviendo así un entorno más ágil y favorable para la actividad económica.

¿Qué es una declaración responsable?

En Ródenas Abogados, definimos la declaración responsable como un documento presentado por la parte interesada en el que declara, bajo su responsabilidad, cumplir con todos los requisitos establecidos por la normativa vigente. Este documento tiene como objetivo obtener el reconocimiento de un derecho o la facultad para realizar determinadas obligaciones.

En este proceso, el interesado cuenta con la documentación que respalda su cumplimiento y se compromete a ponerla a disposición de la Administración cuando esta lo solicite. Además, se compromete a mantener el cumplimiento de los requisitos durante todo el tiempo que dure el reconocimiento o el ejercicio de dicho derecho, según lo establece el art. 69.1 de la Ley de Procedimiento Administrativo Común (LPAC).

¿Qué es una comunicación previa?

La comunicación previa, por otro lado, es un trámite mediante el cual los interesados notifican a la Administración Pública los datos relevantes para identificar la actividad o el derecho que desean iniciar o ejercer. En este caso, la comunicación previa es un acto informativo que permite a la Administración conocer los detalles de la actividad, sin que se asuma la misma responsabilidad de cumplimiento continuo que en la declaración responsable. Esto se realiza con el objetivo de comenzar una actividad o ejercer un derecho, conforme al art. 69.2 de la LPAC.

¿Son la declaración responsable y la comunicación previa iguales?

No, la declaración responsable y la comunicación previa no son lo mismo, aunque comparten ciertas características y objetivos en la relación entre particulares y la Administración. Ambas figuras permiten a los interesados informar a la Administración sobre el inicio de actividades o el ejercicio de derechos sin necesidad de un control previo, sustituyendo el proceso de autorización por un acto de comunicación. Sin embargo, estas figuras funcionan como técnicas alternativas a la autorización, y aunque menos restrictivas, buscan mantener un control a posteriori por parte de la Administración.

Diferencias principales entre la declaración responsable y la comunicación previa

La diferencia clave entre ambos trámites radica en el grado de responsabilidad y compromiso de cumplimiento. En la declaración responsable, el interesado declara expresamente cumplir con los requisitos y se compromete a mantenerlos en el tiempo. En la comunicación previa, en cambio, el interesado simplemente informa a la Administración de su intención de iniciar una actividad o derecho, quedando la supervisión administrativa en una fase posterior y sin la obligación de un compromiso expreso de cumplimiento. Ambos procedimientos simplifican los trámites administrativos, pero la declaración responsable implica un nivel mayor de responsabilidad para el interesado.

Aunque la Ley de Procedimiento Administrativo Común (LPAC) las regula de forma similar y con pocos detalles diferenciadores, existen algunas distinciones clave:

  1. Alcance y envergadura:
    Las declaraciones responsables suelen aplicarse en situaciones de mayor complejidad o envergadura, donde el interesado se compromete activamente a cumplir con los requisitos legales. Las comunicaciones previas, en cambio, suelen emplearse para casos de menor nivel de riesgo o complejidad, donde simplemente se notifica la intención de iniciar una actividad o ejercicio de un derecho.
  2. Compromiso de cumplimiento:
    En una declaración responsable, el interesado declara expresamente cumplir con la normativa vigente y se compromete a mantener dicho cumplimiento. En la comunicación previa, el particular solo informa a la Administración, sin un compromiso de cumplimiento expreso, dejando el control para una fase posterior si es necesario.
  3. Naturaleza jurídica:
    Tanto la declaración responsable como la comunicación previa son manifestaciones de la voluntad del particular y no son actos administrativos propiamente dichos, ya que no emanan de la Administración ni requieren una resolución por parte de ella. No constituyen solicitudes ni inician un procedimiento administrativo en sentido estricto, sino que son actos de autocontrol en los que el particular asume la responsabilidad de cumplir con la normativa.

Finalidad y utilidad en el control administrativo

La declaración responsable y la comunicación previa simplifican el procedimiento y permiten que el particular inicie una actividad sin esperar una autorización formal. Esto facilita el ejercicio de derechos o actividades, otorgando al interesado mayor autonomía y reduciendo la carga administrativa. No obstante, la Administración conserva su potestad de control posterior, con el propósito de asegurar el cumplimiento de la normativa y, en caso necesario, sancionar o rectificar actuaciones fuera de la legalidad.

Ejemplos de Declaración Responsable

  1. Apertura de un comercio: Para abrir un pequeño negocio o establecimiento comercial, como una tienda de ropa o una cafetería, es común que se solicite una declaración responsable. El titular declara cumplir con la normativa local en cuanto a seguridad, accesibilidad, y salud.
  2. Reformas en un local comercial: Cuando se realizan obras de adecuación o reforma en un local para su acondicionamiento (por ejemplo, para instalar una cocina en un restaurante), puede ser necesaria una declaración responsable que asegure que las obras cumplen con la normativa urbanística y de construcción.
  3. Instalación de sistemas de energía renovable: La colocación de paneles solares para autoconsumo en un edificio o una vivienda también puede requerir una declaración responsable, sobre todo si no afecta elementos protegidos o si cumple con las ordenanzas locales.
  4. Modificación de instalaciones en una industria: Para cambios en maquinaria o instalaciones de una fábrica (siempre que no se trate de ampliaciones de gran envergadura), una declaración responsable puede bastar para certificar que se cumple con la normativa industrial y de seguridad.
  5. Apertura de centros de enseñanza o academias privadas: Si una academia o escuela de formación privada inicia actividades, el titular puede presentar una declaración responsable de que cumple con las normativas de seguridad, sanidad y accesibilidad exigidas.

Ejemplos de Comunicación Previa

  1. Inicio de una actividad profesional: Para actividades como la apertura de una consulta de fisioterapia o una oficina de asesoría, en muchos municipios basta con una comunicación previa a la Administración notificando el inicio de la actividad.
  2. Pequeñas reformas en viviendas: Obras menores en un hogar, como pintar, cambiar suelos, instalar muebles de cocina o hacer trabajos de fontanería, suelen requerir solo una comunicación previa, sin necesidad de una licencia o declaración responsable.
  3. Instalación de anuncios publicitarios: Para colocar vallas publicitarias en determinadas ubicaciones, en algunas ciudades solo se requiere comunicarlo previamente, indicando las características y ubicación de la instalación.
  4. Actividades temporales en el espacio público: Para actividades como un mercadillo temporal, evento o feria en un espacio público, en algunos casos basta con una comunicación previa, especialmente si la duración es breve y no se requiere infraestructura especial.
  5. Obras de mantenimiento: Tareas de mantenimiento, como la reparación de fachadas o tejados sin alterar la estructura, a menudo requieren solo una comunicación previa.
  6. Instalación de antenas de telecomunicación: En algunos casos, la instalación de antenas o repetidores de telecomunicaciones puede realizarse con una comunicación previa, siempre que cumpla con las regulaciones de ubicación y seguridad.

Cada municipio o comunidad autónoma puede tener criterios diferentes para exigir una declaración responsable o comunicación previa, y algunos de estos ejemplos pueden variar según la normativa local.

Preguntas frecuentes sobre las diferencias entre declaración responsable y comunicación previa

1. ¿Qué debo hacer en caso de silencio administrativo?

Ni la declaración responsable ni la comunicación previa generan la obligación de que la Administración dicte una resolución, por lo que no existe el concepto de silencio administrativo, ni positivo ni negativo, en estos casos. De hecho, el artículo 21.1 de la Ley de Procedimiento Administrativo Común (LPAC) exceptúa estos procedimientos de la obligación de resolver, ya que permiten al interesado comenzar la actividad sin esperar respuesta de la Administración.

2. ¿Significa esto una prohibición de adquirir facultades contrarias al ordenamiento legal?

Así es. La presentación de una declaración responsable o comunicación previa no otorga al interesado facultades contrarias al ordenamiento legal. Simplemente habilita el inicio de la actividad conforme a la normativa vigente, sin requerir una aprobación administrativa previa.

3. ¿Cómo puedo saber si hay inaplicación de la teoría de la invalidez de los actos administrativos?

En procedimientos basados en declaración responsable o comunicación previa, no se emite un acto administrativo que pueda declararse inválido. La intervención de la Administración en estos casos no da lugar a actos administrativos, sino a actos de los particulares, por lo que no se aplica la teoría de invalidez de los actos administrativos. Esto se debe a que estos trámites no son títulos administrativos habilitantes.

4. ¿Qué sucede si se detectan vicios o irregularidades en la actuación privada?

Dado que la declaración responsable y la comunicación previa no constituyen actos administrativos, no gozan de presunción de validez, como ocurriría con una licencia. Si se detectan irregularidades, la Administración tiene mayor libertad para actuar y corregirlas, sin las limitaciones que implicaría un acto administrativo favorable. Esto significa que la Administración puede intervenir si detecta incumplimientos, pero sin la necesidad de revocar o invalidar un acto administrativo.

5. ¿Qué implica que la declaración responsable o la comunicación previa no sean actos administrativos?

Esto implica que estos procedimientos no otorgan al interesado un “título administrativo habilitante”. Por lo tanto, la Administración conserva todas sus potestades para revisar y, si es necesario, tomar medidas ante posibles infracciones o irregularidades, sin las restricciones propias de una licencia o autorización formal que goza de presunción de validez.

6. ¿En qué casos debo elegir una declaración responsable en lugar de una comunicación previa?

Generalmente, la declaración responsable se utiliza en casos de mayor envergadura o cuando el cumplimiento de requisitos es esencial y debe mantenerse durante la actividad. La comunicación previa, en cambio, suele emplearse en actividades de menor riesgo o complejidad, donde la notificación a la Administración es suficiente para iniciar la actividad.

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